jueves, 2 de marzo de 2006

¿Quién dijo necia?

Tauro. Segundo signo en el orden zodiacal. Regido por el planeta Venus, su punto débil se localiza en el área de la garganta (con toses y gripas al por mayor). Se aferra hasta con las uñas a su elemento Tierra, y, tal vez por eso, se dice que una de sus más grandes características (que algunos osan calificarlo como un terrible defecto) es la necedad. ¿¿Qué qué?? ¿¿Necia yo??

Obstinación, terquedad, necedad. Las investigaciones realizadas por quien escribe arrojan que la definición común de todos los diccionarios elevan al necio al nivel de ignorante e imprudente rematado con el grupo de sinónimos que lo equiparan a un inepto e incapaz. Nunca me imaginé que esta Kittotta fuera por la vida con una etiqueta que conjuga tanto adjetivo calificativo. Y para colmo, tan feos.

Lo que más me confunde es como el mundo puede tachar a una persona (que ya por tendencia astrológica es de espíritu aferrado) con tanta pompa y circunstancia, cuando ésta lo único que hace es defender sus posturas, ideas y realidades sobre la vida.

Vamos a poner un ejemplo. Ahí estaba Kittotta junto con el amor de sus amores armando tremenda sesión nocturna de retas con videojuegos (para lo cuál por cierto soy una absoluta negada). El último paso de tan relevante ocupación era conectar la consola, así que en un hábil movimiento de reptil llegué hasta la barra donde el enchufe debía ser colocado. Pero (siempre hay peros en estos relatos) a la hora de conectarlo noté que la barra estaba apagada, desplacé la vista hasta la conexión y noté que ésta estaba floja, por lo consiguiente, había que colocarlo bien para que todo prendiera. Eso lo puedo decir yo que estaba ahí cual viborilla atestiguando el hecho. La versión del amor de mis amores, sin embargo, cuenta que me fui debajo de la mesa a conectar el condenado jueguillo y como aquello no prendía, se me calificó ipso facto de ser yo quien provocó aquel apagón. Ante semejante injuria, yo me defendí alegando la veracidad de los hechos que desde abajo había notado, y sólo por esa defensa recibí la etiqueta de Necia. Pero, ¿Verdad que eso no es necedad? (quienes estén de acuerdo conmigo favor de levantar su mano derecha)

Y es que si vamos a necedades podemos dejar exentos todos aquellos momentos en donde por cosas como la del ejemplo una persona se defiende con uñas y dientes, siempre y cuando se tenga una razón válida que abrazar. Que si llegaste muy tarde a casa y tus padres te ponen como chancla, calma, siempre habrá una verdad que hacer valer. Que si una niña te pide tu credencial de Costco para comprar una pizza, y tu le indicas a qué nombre saldrá su pedido, calma, siempre tendrás esa verdad como defensa si alguien te acosa diciendo que de lejos parecía que la estabas regañando por no decir "gracias".

No, yo no soy necia. Y no es una necedad que diga que no lo soy. Simplemente que de entre todos los sinónimos, prefiero el de obstinada, que es lo más cercano a la definición de la perseverancia y la tenacidad. ¡Esa sí soy yo! (¡Y sí, tenía que escribir sobre este tema antes de que pasara de moda!)

1 comentario:

Alma dijo...

Te comprendo Tauriana... es como yo, que soy LEO.. y entonces la gente dice eres egolatra y egoísta y yoista... pero NO lo soy, lo que sucede es que los demás no saben que mi YO es en realidad Un YO único y por eso lo cuido tanto. No es que sea egolatra.. ni el centro de atracción, soy sencillita y carismatica, nomás.... jajaja;)